Por Claudio Ragni, Jefe de la División de Formación y Transferencia INN

La corrupción, una sombra persistente que oscurece tanto la esfera pública como la privada, representa un desafío global de proporciones monumentales. Minando la confianza, distorsionando la competencia y derrochando recursos preciados, su impacto se siente en todos los rincones del mundo. En este contexto, surge la norma NCh-ISO 37001 como un faro de esperanza, una herramienta fundamental en la prevención y detección de estos actos perniciosos que socavan las bases mismas de nuestra sociedad.

Pero,¿qué hace que la NCh-ISO 37001 sea tan esencial, y cuáles son las habilidades que podemos fomentar para combatir la corrupción de manera efectiva?

Primero, debemos comprender que la corrupción y el soborno, aunque a menudo se confunden, son dos caras de una moneda. La corrupción abarca el abuso de poder, posición o recursos para obtener un beneficio personal indebido o favorecer a individuos o grupos en detrimento del bienestar común. Esta problemática se manifiesta de diversas maneras, desde el nepotismo hasta el tráfico de influencias y el desvío de fondos públicos, y puede corroer organizaciones enteras o incluso naciones enteras.

En contraste, el soborno representa una forma específica de corrupción, donde se entrega algo de valor, ya sea dinero, bienes o favores, a una persona o entidad con autoridad o poder de decisión. Este pago se realiza a cambio de un trato favorable o ventajas indebidas. El soborno se caracteriza por ser una transacción directa que busca influir en decisiones específicas en beneficio propio o de terceros.

En resumen, la corrupción es un término amplio que engloba múltiples prácticas corruptas, y el soborno es una de sus manifestaciones, concentrándose en el intercambio de incentivos para influir en decisiones concretas. Ambos males socavan la integridad, la equidad y la confianza en las instituciones y en la sociedad en su conjunto. Por lo tanto, la lucha contra la corrupción no puede soslayar el combate al soborno y a otras formas de conducta corrupta.

La norma NCh-ISO 37001, conocida también como "Sistemas de Gestión Antisoborno," ha emergido como un bastión en la batalla contra la corrupción en los ámbitos de la contratación pública y privada. Su relevancia es innegable por diversas razones:

• Prevención desde la Raíz: La norma establece principios éticos sólidos y promueve una cultura organizacional que destierra la corrupción, sentando cimientos para la integridad en todos los niveles, inclusive en las esferas gubernamentales.

• Mitigación de Riesgos: Aborda las condiciones que pueden avivar el soborno, proporcionando un enfoque estructurado para identificar y reducir los riesgos de soborno, especialmente en entornos donde la discrecionalidad y la falta de transparencia son preocupaciones palpables.

• Roles y Responsabilidades Claros: Define roles y responsabilidades nítidos en la prevención y abordaje del soborno, estableciendo una estructura de rendición de cuentas efectiva que disminuye las oportunidades de soborno.

• Mejora la Reputación: La implementación de la norma comunica un compromiso inquebrantable con la integridad y la lucha contra la corrupción, lo que, a su vez, mejora la reputación de la organización y aumenta la confianza del público.

Desarrollar habilidades para prevenir, detectar y responder a la corrupción es imperativo en este contexto. Estas habilidades pueden abarcar:

• Promover la importancia de mantener estándares éticos elevados y valores que fomenten la honestidad e integridad en la toma de decisiones.

• Desarrollar competencias para identificar y mitigar riesgos de soborno en los procesos de adquisición pública.

• Fomentar la transparencia en la toma de decisiones y establecer una cultura de rendición de cuentas en todos los niveles de la organización.

• Estimular la construcción de una cultura organizacional que repudie la corrupción y estimule la denuncia de prácticas corruptas.

Así, la NCh-ISO 37001 se yergue como un aliado fundamental en la cruzada contra la corrupción en la contratación pública y privada, abordando las condiciones propicias para el soborno y delineando competencias esenciales para combatir este flagelo. Su adopción y aplicación efectivas no solo fortalecen la integridad en los procesos de adquisición, sino que también promueven una cultura de transparencia y ética en todos los niveles organizacionales.

Para ampliar aún más la comprensión y la promoción de estas prácticas, ponemos a su disposición dos cursos especialmente diseñados. Estos cursos en formato e-learning, titulados "Modelo general de investigaciones internas – Introducción" y "Investigaciones Internas - Detección de mentiras y conductas engañosas," están diseñados para desarrollar las habilidades necesarias y enriquecer el conocimiento sobre esta norma.

Consideramos que participar en estos cursos representa un paso significativo hacia una lucha efectiva contra la corrupción y el soborno. Le invitamos cordialmente a unirse a nosotros en este viaje hacia la integridad y la ética en el ámbito laboral.